
Esta, querido lector, puede ser tu vida, y por ello, tal vez pienses que Dios nunca te amó, que lo que tú has sufrido nadie jamás lo sufrió, y tal vez tengas razón. Sin embargo, hay una verdad que nunca podrá ser callada, y es que Dios siempre estuvo contigo y gracias a Él tú has podido soportar la aflicción y adversidad. Sin embargo Él aún quiere hacer más por ti. Él quiere sanar tu corazón dolido por el sufrimiento, por la indiferencia, por la hostilidad, por la tristeza. Hoy Dios quiere llevar todo tu dolor y desazón, porque nunca será provechoso para nuestras almas vivir recordando el triste pasado, vivir pensando en que nadie nos ha amado, cuando existe Uno que siempre lo ha hecho. ¿Por qué no hablas ahora con Él? porque no le dice: “Dios, Tú sabes que el dolor que me causaron, aquellos que amé no me deja vivir; que aún lloro recordando mi triste pasado, que aún recuerdo su indiferencia y su desamor. Sin embargo creo que Tú puedes arrancarme este dolor del corazón, que puedes darme la libertad de mis prisiones, y puedes hacer de mí una nueva persona. Toma mi vida en tus cálidas manos, vuelve a hacerme del barro y moldeándome, haz de mi un retrato que refleje tu maravilloso perdón y tu inmenso amor”
No hay comentarios:
Publicar un comentario
Gracias por tu comentarios, me alienta a seguir adelante. Dios te bendiga.